3 may 2011

Encuentro

Ahí estás otra vez. Cruzas la calle como de costumbre, con un paso muy acelerado y cabizbaja. ¿Que piensas? ¿Por qué no miras a los ojos? ¿Ocultas algo? Camino a tu lado y es como si yo no existiera. Acelero mi paso, me devuelvo, te enfrento, y no reaccionas. ¡Qué rabia! Llevo un par de meses observándote, estudiando cada uno de tus pasos, y no logro descubrirte. He intentado hablarte. He comido en el mismo restaurante, al lado tuyo. Ya sé qué comes de lunes a viernes. Que bebes Coca Cola normal y que te encanta el kuchen de manzana. ¡Y tú! Si, tú, no te das cuenta. A veces creo que te asusto, por eso no me hablas. Pero he disimulado bien. Te he visto y eres así con todos. Creo que deberé tomar acciones más arriesgadas. Sí, ahora camino con paso decidido. Te enfrento con toda velocidad. Tú estas ahí, en aquella esquina donde sueles oler las rosas. Quizás la única deferencia que tienes con el mundo. Estoy a pocos metros tuyo. Me hago el distraído, choco contigo y boto tus papeles. Me avergüenzo. Los cojo, te los entrego, me miras, te acercas y dulcemente me dices al oído "Gracias, Armando". Siempre lo supiste. 

4 comentarios:

luiscleverboy dijo...

buena!!!!
felicitaciones...

nico dijo...

te pasaste !!!!jakjakajakj good
felicitaciones

Cristian J. dijo...

Buena Jano!!!!

La Coty! dijo...

jajajaja dedicado a la Pequeña Gigante jajajajajaja...